lunes, 17 de enero de 2011

Sintra y Belém

Como comentaba en mi última entrada, este finde hemos ido a Sintra. Yo ya había estado unas cuantas veces, en breves escapadas de un día, cuando vivía en Lisboa, y me gustaba mucho, y me hacía ilusión ir con Carmen, porque sabía que le encantaría, y que se lo pasaría pipa viendo cosas y sacando fotos. Acerté de pleno, jejeje. Además, nos salió el viaje redondo.


Salimos de Coruña el viernes después del trabajo, y tiramos directas para allá. Llegamos al hotel sin perdernos demasiado (cosa rara en nosotras) a eso de las 9 de la noche. A la mañana siguiente, madrugar y a visitar:

1. Castelo dos Mouros




2. Palácio da Pena (aka "Exin Castillos" :P)




3. Quinta da Regaleira




En Sintra hay muchas otras cosas que ver, pero en un sólo día, no da tiempo de mucho más, además todas las visitas requieren mucha caminata, y mucho subir y bajar escaleras, y es cansado, así que... De lo único que me quedó pena fue de no volver al centro caminando por el atajo bosque abajo, pero con la espalda maltrecha como la tengo, y teniendo pagado el autobús (lo compramos para subir, pero el ticket es ida y vuelta), como que no era plan... de hecho, aún así me desperté el domingo con el lumbago a tope. Pero bueno, unos estiramientos bien hechos y a vivir, jejeje.

Lo que más me gustó fue la Quinta da Regaleira, en parte porque era lo único de lo que vimos que no conocía, pero es que es impresionante de verdad, sobre todo los jardines, con sus grutas, túneles, pozos, torres... increíble de verdad...

A cenar fuimos a un restaurante Indio que, aunque un poquito caro, la verdad es que la comida estaba buenísima, y el trato también.

Ah, y que no se me olvide mencionar los deliciosos pasteles de "A Piriquita", la pastelería más famosa de Sintra, donde hacen unos "traveseiros" increíbles (son cañitas de hojaldre rellenas de compota de manzana), además de todos los demás pastelitos, de los que comimos unos cuantos, ejejeje.


Al día siguiente, aunque podríamos haber quedado en Sintra y ver más cosas, yo preferí tirar a Belém, la zona más turística de Lisboa, porque los domingos por la mañana es gratis la entrada a los sitios y merece mucho la pena. Además, para ir desde Sintra es sólo media hora en coche y no hay que entrar en la ciudad, así que ni te encuentras atascos, ni te pierdes, ni nada.

1. Torre de Belém




2. Monumento a los Descubrimientos



3. Monasterio de los Jerónimos




A la torre de Belém yo ya había entrado, pero al monumento de los descubridores no había subido, así que me quité esa espinita, aunque he de decir que no vale demasiado la pena: los muros arriba son altos y yo bajita, así que no podía ver demasiado hacia abajo... además eso no era gratis aunque fuese domingo, pero bueno, lo que digo, que guay haberse quitado la espinita.

Y muchísimo mejor la espinita del monasterio, que había intentado visitar varias veces antes y nunca lo pillaba abierto (no sé por qué, la verdad, no me acuerdo), sólo cuando había que pagar 8 eurazos, que en mis tiempos estudiantiles eran una pequeña fortuna que no me podía permitir así por las buenas. Me encantó, la verdad, sobre todo el claustro.

A mediodía, quería ir a comer a un restaurante que conocía en el centro, pero no sabía llegar muy bien en el coche, y tras dar unas cuantas vueltas con el coche, y con el miedo a que en Portugal dejan temprano de darte de comer, decidimos volver a la zona de Belém y comer por allí. Tuvimos mucha suerte, comimos en un restaurante pequeño en el que no nos sajaron más de la cuenta, a pesar de su buena localización (por 30 euros comimos bien las dos). Además comimos comida portuguesa, raciones abundantes, y estaba muy rica: Carmen comió bacalao al horno con langostinos y yo "alheira de caça", que es una especie de salchica extraña típica de Portugal (no compatible con todos los paladares españoles, advierto).

Ah, también compramos los famosos pastéis de Belém, que a mí me encantan y hacía cinco años que no comía (desde que volví de Portugal), y un bolo de rei, que es parecido al roscón de Reyes nuestro, pero con mogollón de frutas confitadas, frutos secos y azúcar anisado. Delicioso también, jejeje.

Ya a la vuelta, yo quería, antes de volvernos definitivamente, buscar un supermercado para comprar algunas cosas de las que tengo cierta nostalgia. Cuando caí en que era domingo me desilusioné un poco y, de hecho, no buscamos el supermercado, pero veníamos cruzando Lisboa por una gran avenida y vimos las indicaciones para el Centro Comercial más grande de la ciudad, el Colombo, que quedaba justo de camino, y pensamos que capaz que estaba abierto de todas formas (hay en sitios que no se cierra los domingos y yo no me acordaba de cómo iba en Lisboa). Bingo. Así de rebote pudimos comprar en el supermercado más grande de la ciudad (hasta donde yo sé), y volvimos con todas las cosas que que echo de menos de la comida portuguesa (que tampoco son tantas):

  • Azúcar amarillo
  • Guayabada
  • Queso
  • Vino verde
  • Un buen surtido de zumos Compal de sabores que no se venden en España.

2 comentarios:

  1. Ohhhhh, fin de semana portugués, aunque eso de que hayáis estado al ladito de Lisboa (corrígeme si me equivoco pero creo que Belem aún no pertenece a Lisboa, aunque es como si fuese un barrio de aquélla) no lo puedo entender. Ya sabes que yo siento pasión por esta ciudad, no tanto por Sintra. Feliz 2011

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  2. Bueno... no sé... puede que por haber vivido en Lisboa durante un año, el recuerdo que tengo de la ciudad no es tan romántico como a lo mejor el tuyo... Lisboa me gusta y me trae gratos recuerdos, pero Sintra también, y a su favor Sintra tiene el hecho de ser un pueblo tranquilo, que me lo pedia mucho más el cuerpo, y que encontramos una oferta de hotel muy buena. También llevamos a los perros, y Sintra era más cómoda para sacarlos a pasear. Y llevando nuestro propio coche, a mí Lisboa me daba un poco de miedo, no a que nos pasara nada, pero a pasarme toda la estancia dando vueltas con él. Y para un fin de semana normal, Sintra es más abarcable... y también que creo conocer a mi mujer, y pensé (creo haber acertado) que le gustaría más Sintra. Lo de Belém se me acordó así de repente, cuando ya lo teníamos decidido, y no sé seguro si pertenece a Lisboa o no, pero creo que si... de todas formas, es como otro mundo, y a la "Lisboa de verdad" no fuimos. Bueno, al súper del colombo, jejejeje

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